Es el coordinador del Programa de Marina de Vida Silvestre y amplía información sobre el derrame de petróleo producido en aguas estadounidenses. “Es un desastre ecológico de enormes dimensiones y no se ha podido frenar el avance de petróleo aún y no se sabe cuándo se va a poder tapar todo”.
Cañete explica que la razón por la cual se produjo la catástrofe fue por “una válvula de seguridad muy costosa que falló al operar y lamentablemente no se ha podido reparar todavía. Se dice que son 800 mil litros de petróleo que se derraman por día”. Además, “no sólo se trata del petróleo sino el disolvente –para dispersar y desconcentrar el combustible– que es tóxico y también contamina el agua”.
“Estamos ante el caso de una plataforma que explotó por un exceso de presión y por eso la válvula está rota. Y en la legislación internacional se sabe que el que contamina, paga”.
Y, por último, agrega: “Al petróleo hay que sacarlo y evitar que llegue a la costa y que se mezcle con los fondos barrosos porque sino sus efectos van a durar a largo plazo”.
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