lunes, 20 de septiembre de 2010

¡Viernes de anécdotas!

Como para terminar muy bien la semana, el viernes fue el día en el que se contaron situaciones referidas a las barreras que tiene que sortear una persona con capacidades diferentes pero desde un lado tragicómico. El primer incidente fue llegando a la radio a la 1: 45 de la tarde cuando el programa comienza a las 2. El tráfico era insoportable en el centro porteño. Todos apurados por llegar al lugar al desean primero y sin piedad a la hora de interrumpir el andar de los demás. Un automovilista decide detenerse en donde hay una rampa para discapacitados con una gran línea amarilla que indica "prohibido estacionar". Sin importarle eso, se detiene a comprar unos cigarrillos y cuando se da cuenta que su actitud no es la correcta dice "¿no me esperas un segundo?, ya termino". Si hacemos un análisis de la situación, todos estamos apurados y el tiempo es importante para todos y cada uno de nosotros. Se puede esperar pero ¿por qué deberíamos hacerlo si nosotros también estamos apurados, nuestro tiempo también vale y es nuestro derecho que la rampa este libre para que podamos descender?
Otro inconveniente es encontrar las rampas obstruidas por mal mantenimiento, como el es el caso de la foto.
Desde Contrarreloj en la columna "Cruzando Puentes", llamamos a la reflexión y recordamos que tu derecho comienza donde termina el del otro ¡A ponerlo en práctica!

No hay comentarios.: